martes, 23 de diciembre de 2008

Mucha Felicidad.

A todos vosotros que navegáis por mis absurdos y dedicáis unos minutillos de vuestro tiempo a comentar mis pensamientos, enviándome muestras de ánimo y afecto. A los que buceáis un rato por nuevas aguas sin dejar huella. A todos los ingeniosos y creativos que puntualmente actualizáis vuestros espacios asegurando mi entretenimiento. A los que os gustan estas celebraciones y las disfrutáis a tope y a los que no os gustan demasiado. En fin, a todos os envío mis mejores deseos, no sólo para estas fiestas, sino para cada uno de los días que nos restan por compartir, que espero sean muchos. Gracias por estar siempre ahí, a un golpe de teclado.
¡MUCHA FELICIDAD!





jueves, 11 de diciembre de 2008

La pícara de mi niña.

Ayer me tocaba la revisión ginecológica correspondiente al mes de Diciembre. Teníamos la cita para las 13:15 h, pues, también habíamos concertado la segunda ecografía en 4D. Alba se encuentra estupendamente, creciendo según los paramétros establecidos. Tiene un peso de 1.128 gr. Yo estoy bien, no he subido de peso, curiosamente he adelgazado 300gr, tengo algo de anemia, que también es normal, por lo que tengo que duplicar la toma diaria de hierro y debo hacerme una curva de glucemia, pues, el test de O'Sullivan me ha dado positivo. Ésto es lo que peor me ha sentado, no por la gravedad, que no la tiene en absoluto, lo peor que puede pasar es que desarrolle diabetes gestacional y con una dieta se soluciona, sino porque la dichosa curva consiste en una primera extracción de sangre y, tras ella, la ingesta oral de una concentración de glucosa de 100 gr para, posteriormente, someterme a otras tres extracciones más, a la hora, a las dos y a las tres horas de la toma. Y en este intervalo de tiempo he de estar sentada, sin realizar otro movimiento que no sea el ojear una revista. Y ésta es la faena, porque me resultó interminable el primer test, en el que tan sólo tuve que esperar una hora, imaginaos cómo será la espera de tres...Me llevaré un libro, a ver si la impaciencia permite que me concentre. Lo haré la semana que viene.

Tras la revisión rutinaria nos preparamos para la eco en 4D. Esperaba el momento con ansia, pues, desde el mes pasado no había visto a mi pequeña. Nada más comenzar el gine nos dice que está muy mal colocada y, efectivamente, apenas pudimos ver nada, porque, además, tenía el cordón delante de la carita. Luego de varios intentos me recomienda caminar durante un rato, a ver si conseguimos que se mueva y la podemos captar mejor después. Y eso hago. Me planto en la sala de espera y comienzo a dar vueltas. Un tanto vergonzoso, pues, había dos visitadores médicos esperando a que les atendiese. Por fin les dió paso y me quedé a solas con Guille. Y venga a dar vueltas y vueltas. Más de media hora caminando en círculo. Salieron los visitadores y entramos de nuevo. Me tumbo y me coloco y cuál es mi sorpresa al ver que mi niña no se había movido y que estaba dormida. ¡Será posible, no sólo no se mueve para que la podamos ver, sino que, aún encima se queda frita después de tenerme dando vueltas como una loca durante más de media hora! ¡Será cabroncilla! Ya me vacila y aún no ha nacido. Debido al poco éxito obtenido, el gine nos recomienda volver a última hora de la tarde para intentarlo una vez más.

Dicho y hecho. LLegamos a las 19:30 y comenzamos. A pesar de que la colocación no era la más idónea nos permitió "robarle" unas cuántas imágenes. Está mal que yo lo diga, pero no me negaréis que mi niña es preciosa, miradla qué rica está haciendo pucheros. El próximo Enero haremos otra eco. Para entonces, espero que abandone sus visos de estrella antipaparazzi y nos deje verla en toda su dimensión.

viernes, 5 de diciembre de 2008

No me toques....la barriga.


Lo he decidido. Después de meditarlo detenidamente he llegado a un acuerdo conmigo misma. Seré desagradable. Una embarazada borde y desagradable. Os preguntaréis porqué.
Porque como menciono en el título del post, ¡no quiero que me toquen la barriga!. Y me explico. Es una costumbre bastante habitual tocar la barriga de las embarazadas. No sé si es porque provoca ternura, porque dá fortuna, porque sienten envidia (sana, supongo)... qué se yo, lo que sí sé es que parece que tengo un imán en lugar de un abdomen. Y para seguir aclarando, apostillo: no me incomoda que sea alguien cercano el que lo hace, es decir, mi suegra, mi cuñada, mi sobrina, mi amiga, por ejemplo, consiento que lo hagan y no me importa, aunque reconozco que si pudiese, mi barriguita sólo recibiría las caricias de mi media costilla y las mías. Coto privado de caricias, pondría en un cartel.
Pero lo que me enerva enormemente, es que me acaricien aquellas personas a las que no me une ningún tipo de lazo afectivo o emocional. Pienso en cuánta energía negativa pueden estar transmitiendo a mi niña a través de sus manos de un modo consciente o inconsciente, quién sabe... hay individuos con un aura muy tenebrosa y las embarazadas somos tremendamente receptivas y estamos tremendamente sensibles ante cualquier factor. Será el instinto protector, que aflora. Así que, espíritus del bien, yo os invoco para que mantengáis alejadas de mí las manos ajenas. Que así sea.
¡Qué a gusto me he quedado, después de plasmar esta rabieta....!